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Crear solo lo necesario, justo cuando se necesita: así imprime el futuro sostenible.   

En Favism3d, creemos firmemente que la innovación tecnológica y el respeto por el medio ambiente deben ir de la mano. Por eso, nuestras principales líneas de trabajo —impresión 3D y grabado láser— no solo nos permiten crear productos personalizados y de alta calidad, sino que también nos brindan la oportunidad de hacerlo de forma más sostenible y consciente.

Impresión 3D: Producción bajo demanda con mínimos residuos 


La impresión 3D ha transformado el modo en que diseñamos y fabricamos productos, permitiendo una producción más eficiente, personalizada y responsable con el medio ambiente. A diferencia de los métodos tradicionales que parten de bloques de material y generan numerosos recortes o sobrantes, la impresión 3D es un proceso aditivo: el material se deposita capa por capa, creando el objeto desde cero, con una optimización precisa del material utilizado.


Es cierto que, en algunos casos, se generan elementos de soporte para mantener la geometría de ciertas piezas durante la impresión. Sin embargo, estos excedentes pueden ser reciclados, ya sea triturándolos para reutilizarlos como materia prima en nuevas bobinas recicladas o enviándolos a centros especializados. Gracias a estas prácticas, los residuos generados en cada impresión son mínimos y gestionables, especialmente si se combinan con un diseño bien optimizado desde el inicio. 

Árbol impreso en 3D sobre base de césped, rodeado de símbolos de reciclaje, transmitiendo el concepto de impresión 3D sostenible.
Impresora 3D fabricando una planta verde, con símbolo de reciclaje de fondo, ilustrando la impresión 3D sostenible.

En nuestro taller, trabajamos principalmente con PLA (ácido poliláctico), un polímero derivado de fuentes vegetales renovables como el almidón de maíz o la caña de azúcar. Aunque no se degrada de forma natural en el entorno como los residuos orgánicos, sí es compostable bajo condiciones industriales específicas de temperatura y humedad, lo que lo convierte en una alternativa mucho más sostenible que los plásticos convencionales a base de petróleo. Esto significa que, al final de su vida útil, el PLA puede ser procesado adecuadamente para reducir su impacto ambiental, siempre que se disponga de la infraestructura de reciclaje adecuada.

Además, al trabajar bajo pedido, evitamos producir más de lo necesario. Esto no solo reduce el consumo de materiales y energía, sino que también elimina la necesidad de almacenar grandes inventarios que muchas veces terminan desechándose. En definitiva, la impresión 3D nos permite crear objetos de forma eficiente, responsable y adaptada a un mundo que necesita fabricar menos, pero mejor.

 


Impresora 3D con un globo terráqueo impreso, representando el impacto global y la sostenibilidad en la fabricación aditiva.

Impacto global de la impresión 3D

Se estima que la adopción global de impresión 3D podría reducir en un 5% las emisiones industriales de carbono para 2030, gracias a la producción descentralizada y eficiente.

Cabezal láser grabando con precisión sobre madera clara, creando líneas limpias y detalladas de forma eficiente.

Grabado láser: limpio y eficiente

El grabado láser no utiliza tintas ni productos químicos, lo que lo convierte en una de las técnicas decorativas más limpias y de bajo impacto.

 

Gráfico de balanza sobre eficiencia energética, comparando producción con impresora 3D y energía verde frente a fábrica tradicional.

Consumo energético

Los procesos de impresión 3D no requieren hornos, moldes ni grandes instalaciones, lo que supone una reducción significativa en consumo energético frente a la inyección de plásticos u otras técnicas industriales.


Grabado láser: Precisión sin residuos



El grabado y corte láser es otra tecnología limpia que destaca por su precisión milimétrica y bajo impacto ambiental. Este proceso no requiere tintas, productos químicos ni contacto físico, lo que reduce el consumo de recursos y evita la generación de desechos contaminantes.


Al trabajar directamente sobre el material final (madera, metacrilato, cartón, cuero, etc.), el láser permite un uso altamente eficiente de la materia prima, sin necesidad de tratamientos adicionales que impliquen emisiones o residuos tóxicos.


Además, gracias a la versatilidad de esta técnica, podemos reutilizar recortes y sobrantes de otras producciones, transformándolos en nuevos productos creativos y funcionales, fomentando así la economía circular.

Cabezal de láser grabando con alta precisión un mapa detallado sobre cartón, demostrando mínima generación de residuos.



Reducción desperdicios de material

90 %

 Reducción emisiones  CO₂

50%

 Material reciclable 

70%  

 Reducción sobreproducción

30%

 Reducción huella de carbono

40%

 Eficiencia de la maquinaria

30%

 Reducción consumo energético

80% 

 Reducción peso 

60%


Gráfico ilustrando 'Productos duraderos' con iconos de regalo, corazón con reloj y flor en jarrón, promoviendo la reducción del consumo.

Productos que duran, productos con propósito 



En un mundo cada vez más marcado por el consumo rápido y la obsolescencia programada, apostamos por ofrecer productos con alma, diseñados para durar en el tiempo. Ya sea un regalo personalizado, una pieza decorativa o un detalle para un evento, cada creación busca tener un valor emocional y una utilidad real, lo que fomenta un consumo más consciente y responsable.